En ocasiones justificamos el hecho de que los buenos empleados se van por falta de incentivos económicos. Afirmar lo anterior es una manera sencilla de salir del paso.
En la empresa moderna, se entiende ya, que un empleado con talento que abandona la empresa, es un punto contra la rentabilidad y su salida hace corresponsables a todos.
A continuación encontrarás algunos puntos prácticos para cuidar de tus empleados
• Procura que las vacantes se vayan llenando con personal de la empresa. El “fichaje” externo, puede hablar de que no se ha dedicado suficiente tiempo para preparar a los colaboradores. Además queda el pensamiento de que no se puede progresar en la empresa.
• Procura comunicar todo proyecto de la empresa; apaga “radio pasillo”. Todos trabajan mejor si saben para qué y por qué lo hacen. Analiza la eficacia de los medios de comunicación que se utilizan en la empresa.
• Pregúntale a todos tus colaboradores, si saben lo que la empresa y tú esperan de ellos. Si te das cuenta que alguien titubea, acláraselo lo mejor posible y de buena manera. No des por hecho que conocen las prioridades de su trabajo, clarifícaselas también.
• Evita la tensión que genera la amenaza continua del despido. No uses con tanta frecuencia el “aquí nadie es indispensable” o la de “aquí hay que tener las maletas hechas” no consigues mejores resultados a lo más lograrás que te engañen.
• Evita criticar a la empresa o a la alta dirección. Solo promueves deslealtad en el equipo y te expones a ser tratado de la misma manera. Además darás la impresión de que no estás alineado con las directrices de la empresa.
• Procura que “el nuevo” lo sea solamente por pocos minutos. Arrópale, haz que lo orienten, no le pidas que se integre: tienes que integrarlo.
• Recuerda que trabajar bajo presión les gusta a pocos. Planea adecuadamente para que puedan disfrutar de su vida familiar.
• Felicita a los que destacan en su trabajo, de corazón y con sinceridad.
• Fórmalos en todo, desde el oficio hasta en puntos personales, hazlo con sencillez. Te estarán agradecidos.
• Recuerda que la motivación es personal, pregunta a cada uno qué es lo que les motiva. Te llevarás sorpresas.
José Luis Castañeda Lerma
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