logoP31

Líderes en formación de líderes desde 1992

Me escribía recientemente uno de nuestros alumnos: «De verdad que harta tantas cosas que suceden alrededor nuestro y que afectan a cada uno y a nuestra familia: pornografía en el internet, ataques a la religión, relaciones aberrantes; comunicadores que engañan, droga en la esquina de tu casa; autoridades corruptas y te podría seguir enumerando una serie de cosas que de repente ves y que te comienzan a parecer normales, es una falta total de valores: Nos estamos enfrentando a una degradación social ¿cuándo cambiarán las cosas?»

Posiblemente, alguna vez te habrás preguntando o comentado algo parecido y quizá te preguntes también lo mismo.

Por más que nos lo repitan, los verdaderos cambios están en cada uno de nosotros.

Sí, el cambio está en ti. No quiere decir que armes una revolución, o que reúnas personas para una manifestación demostrando tus dotes de líder. ¡No! No es por ahí.

Tampoco es preciso que hagas grandes cosas. Los cambios que se requieren son pequeñas cosas que sí están en nuestras manos componer. Lo importante es que puedas influir en tu entorno, que normalmente será en tu familia y con las personas que trabajan codo con codo junto a ti.

El cambio será en cosas tan simples como: dejar tu escritorio o lugar de trabajo ordenado; llegar a tiempo a las juntas; ser consistente entre lo que dices y haces; ser empático con la gente; cuidar los detalles pequeños de tu trabajo; esforzarte por tratar a tus hijos; servir mejor en casa; evitar situaciones degradantes, tanto en espectáculos como en comportamientos. Todo eso sí que está en nuestras manos, todo esto hace que “calientes” el ambiente alrededor tuyo.

No olvides que la influencia “es el reconocimiento de tu calidad moral” por las personas que están cerca de ti. Y con esa influencia podrás hacer cantidad de cosas positivas a tu alrededor.

Uno de los libros más vendidos en diferentes idiomas es “Camino” de Josemaría Escrivá. Un librito con máximas de todo tipo, pero que son efervescentes cuando los profundizas, en uno de sus puntos dice lo siguiente: «¡Influye tanto el ambiente!", me has dicho. —Y hube de contestar: sin duda. Por eso es menester que sea tal vuestra formación, que llevéis, con naturalidad, vuestro propio ambiente, para dar "vuestro tono" a la sociedad con la que conviváis (…)»

Esfuérzate por dar un tono positivo a esta sociedad, cansada, superficial pero que incide, desgraciadamente en nuestras vidas.

Es cansado ver personas que deberían ser ejemplo y que no lo son, que se ponen de ejemplo y son rechazadas. Que les falta exigencia en los valores básicos que nos deben distinguir como seres humanos; que cambian lo mejor por lo más fácil y que desgraciadamente y -a veces sin querer- son nuestros referentes, son aquellos que tratamos de imitar.

Sí, de verdad que el cambio de la sociedad está en el cambio que hagas en tu vida. Con orden. Primero tu familia; luego tus amigos y como una piedra que se lanza al agua y que genera círculos concéntricos, se irá cambiando lo demás.

¡Acostúmbrate a decir que no!, otra máxima de ese libro que te comentaba más arriba y que en ocasiones nos cuesta, porque aceptamos ¡todo!, sin valorarlo, sin profundizarlo. Y vamos admitiendo, primero en lo personal, luego en la familia y después en el trabajo, actitudes y antivalores a los que es muy sencillo acostumbrarse, porque nos adormecen, porque es más fácil.

El problema más grave es estar esperando que el cambio venga de fuera, que te cansarás de esperarlo porque nunca llegará.

José Luis Castañeda Lerma

###BLANK###